Home » Organismo Internacional de Energía Atómica llega a Ucrania
Mundo

Organismo Internacional de Energía Atómica llega a Ucrania

Rusia valora "muy positivamente" llegada del OIEA a la central de Zaporiyia

Moscú, 2 sep. Rusia valoró hoy “muy positivamente” la llegada este jueves de la misión de expertos del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) a la central nuclear de Zaporiyia, en Ucrania.

“En general, valoramos muy positivamente el hecho de que pese a todas las dificultades y problemas, incluidos los vinculados con las acciones provocadoras, esta misión haya llegado y comenzado a trabajar”, dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa telefónica diaria.

Al mismo tiempo, recalcó que “de momento es prematuro hacer evaluaciones” sobre la labor de los expertos del OIEA, que llegaron a la central encabezados por el director general del Organismo, el argentino Rafael Grossi.

El portavoz de la Presidencia rusa destacó que “el equipo (de expertos) está en el lugar y continúa trabajando… pero lo importante es que la misión está allí”.

“La misión debe hacer una evaluación del estado de central y de los asuntos relativos a la seguridad nuclear”, agregó.

A su vez, el ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, aseguró hoy que el Ejército ruso, que controla la central de Zaporiyia, no tiene armamento pesado en el territorio de la planta ni en las zonas aledañas.

Rechazó por “falsas” la acusaciones del Gobierno de Kiev de que las tropas rusas se escudan en importantes instalaciones energéticas para atacar a las fuerzas ucranianas con sistemas de artillería de largo alcance.

“Desde mediados de julio las Fuerzas Armadas de Ucrania, empleando armamento occidental, atacan regularmente la infraestructura de la central nuclear de Zaporiyia”, denunció Shoigú. EFE

El peligro de una explosión

El combustible nuclear está dentro del reactor atómico. Todavía no se ha descargado. Además, hay una piscina de recarga y almacenamiento de combustible nuclear en la sala central que también contiene uranio y conjuntos de combustible”, ha explicado el portavoz de la central, Andrii Tuz, que ha lanzado una seria advertencia sobre lo que supondría que se rompiera la cubierta sellada debido a un ataque de una bomba.

A pesar de los problemas que han surgido debido al incendio de esta madrugada, actualmente los índices de radiación en la zona son “completamente normales”, según afirmó el ministro ucraniano de Exteriores, Dimitro Kuleba. Pero sí que ha mostrado su preocupación en caso de que la central fuera atacada: “Si explota será diez veces más grande que Chernobyl en 1986. Los rusos deben cesar el fuego inmediatamente, permitir el acceso a los bomberos y crear una zona de seguridad”.

Mucho más explícito ha sido el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, al indicar que “por primera vez en la historia de la humanidad, el Estado terrorista (refiriéndose a Rusia) ha recurrido al terrorismo nuclear. ¡Debemos detener al Ejército ruso de inmediato! Si hay una explosión, será el fin de todo, el fin de Europa”, advirtió a la vez que solicitaba la acción inmediata de los países europeos.

Un Chernobyl del siglo XXI

El 26 de abril de 1986 se produjo el mayor accidente nuclear de la historia cuando una serie de errores en cadena provocaron la explosión de uno de los reactores de Chernobyl. Como consecuencia de la explosión fueron 30 (al menos esa fue la información de la URSS) las personas que murieron de manera directa, pero como siempre, y con todo lo que atañe a la radioactividad los problemas llegaron desde ese momento y hoy en día se siguen sufriendo las consecuencias. Se contaminaron 142.000 kilómetros cuadrados en Ucrania, Bielorrusia y parte de Rusia debido a que la estructura del núcleo de uranio ardió durante más de dos semanas emanando radiación sin control.

La lluvia radiactiva fue 400 veces superior a la que se liberó en Hiroshima, más de 300.000 personas huyeron de sus hogares y la multitud de cánceres que todavía hoy se padecen debido al accidente se cuentan por miles. Muchos han sido los informes que se han hecho a posteriori, uno de los más llamativos es el de 2018 del New York Times. El diario estadounidense publicó que a más de 200 kilómetros de donde se produjo la explosión, la tierra seguía contaminada. De hecho, se estima que hasta el 2040 no podrá ser zona habitable.

mos/ah

Etiquetas

Agregar comentario

Haga clic aquí para publicar un comentario

Social Media Auto Publish Powered By : XYZScripts.com