Los últimos ataques aéreos sobre la región de Tigray corren el riesgo de empeorar el ya devastador impacto de las hostilidades sobre la población civil, advirtió este martes el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, en un comunicado.
“Desde el 31 de agosto hemos recibido numerosos informes sobre víctimas civiles y destrucción de objetos civiles debido a los ataques aéreos y de artillería en Tigray; las interrupciones en las comunicaciones hacen especialmente difícil verificar los informes, pero está claro que el número de víctimas civiles es absolutamente asombroso”, dijo Türk.
Entre los muertos recientes se encuentra un miembro del personal del Comité Internacional de Rescate que estaba prestando asistencia humanitaria con un equipo a mujeres y niños, añade el comunicado de la OACDH.
“En medio de una situación humanitaria sombría, esto es completamente inaceptable”, dijo el Alto Comisionado Türk.
Türk también advirtió del riesgo de una escalada de las hostilidades.
“También me preocupa profundamente el importante riesgo de escalada a la luz de la continua movilización masiva de soldados y combatientes por parte de varias partes del conflicto”.
El Alto Comisionado hizo un llamamiento a todas las partes para que pongan fin a las hostilidades y trabajen por una solución pacífica.
“Según el derecho internacional, los ataques indiscriminados o los ataques dirigidos deliberadamente contra civiles u objetos civiles constituyen crímenes de guerra”, dijo Türk.
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