Tchouaméni, un jugador versátil que puede desempeñarse tanto como pivote en el centro del campo como en la línea defensiva central, plantea un dilema táctico para Ancelotti. Con Antonio Rüdiger como pilar indiscutible en la zaga, la incertidumbre recae en quién será su compañero: ¿Nacho, habitual en esa posición, o Tchouaméni, quien ha demostrado solidez cuando ha sido alineado como defensa central?
Aunque Nacho ha sido la elección más frecuente como pareja de Rüdiger en la defensa, Tchouaméni ha brillado en los pocos encuentros en los que ha sido colocado en esa posición. Con él en la línea defensiva, el Real Madrid ha cosechado seis victorias y un empate, este último con cierta controversia en Mestalla ante el Valencia.
Ancelotti elogia la capacidad de Tchouaméni para adaptarse a distintos roles en el campo, destacando su salida limpia de balón y su fortaleza en los duelos. Esta posible reubicación de Tchouaméni en la defensa impactaría directamente en Nacho, quien podría perder su puesto en el once inicial.
Si Tchouaméni juega en la zaga, la plaza vacante en el centro del campo sería para Eduardo Camavinga, quien ha sido descartado por Ancelotti para posiciones como lateral izquierdo. Esto daría lugar a un mediocampo liderado por Toni Kroos, acompañado por Fede Valverde y Camavinga, con Jude Bellingham en una posición más adelantada para enlazar con Vinicius y Rodrygo en la delantera.
El futuro de Nacho en el equipo también está en entredicho, ya que su temporada ha estado marcada por algunas dudas y hay incertidumbre sobre su continuidad en el club a partir del próximo verano.
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